Opción es válida sólo de acuerdo al tipo de labores que desarrolle la madre y si no presenta un embarazo gemelar o de riesgo.
Si bien una futura madre puede sentir que su embarazo marcha perfectamente, y por ésto decide trabajar hasta el último momento antes de que nazca su hijo, en la práctica esta decisión no la debe tomar ella, sino el ginecoobstetra que la esté tratando.
Según el doctor Jorge Carvajal, Director del Laboratorio de Medicina Materno Fetal del Departamento de Obstetricia y Ginecología de la Universidad Católica, el que una mujer decida trabajar en su prenatal, depende exclusivamente del tipo de labor que realice. “Si su trabajo es liviano, podrá trabajar hasta el final del embarazo y luego tener un descanso postnatal más prolongado”, asegura.
La importancia de que sea una decisión tomada por el médico tratante, se explica porque, a juicio del médico, existen razones importantes para realizar reposo antes del parto, “y sería un problema si es la paciente la que asume la decisión sin consultar”, comenta.
Una segunda ventaja que es posible encontrar en este cambio de tiempos de descanso, está dada en caso de niños prematuros. Si un bebé nace a las 34 semanas, la madre no tiene descanso prenatal y su postnatal será de la misma longitud de uno normal. “Se sabe que los prematuros requieren más tiempo con su madre, por esto muchas veces la paciente requiere licencia del pediatra por enfermedad de hijo menor de un año. Si se permitiera traspasar el prenatal al postnatal, en casos de prematuros, la madre tendría legalmente un tiempo mayor con su hijo”, asevera el profesional.
Vida Normal
Mucho se ha hablado de que en el último trimestre del embarazo la mujer debiese extremar sus cuidados y dejar de realizar una vida normal.
Según el médico, si el embarazo se desarrolla sin problemas, y la futura madre se siente bien, en general no debe tomar ninguna precaución especial, excepto lo que la naturaleza propia le indique. “Con el abdomen abultado es obvio que hay cosas que no se pueden hacer, pero no existen restricciones especiales. No existe inconvenientes para manejar, y siempre la embarazada debe usar un cinturón de seguridad”, puntualiza.